sábado, 28 de abril de 2012
EL CINE QUE VIENE
Trailer de "Putos peronistas, cumbia del sentimiento", de Rodolfo Cesatti
Trailer de "Juruá, hombres de hierro", de Rodolfo Cesatti
Trailer de "El campo", de Hernán Belón
Trailer de "Tiempo muerto", de Baltazar & Iván Tokman
viernes, 27 de abril de 2012
el cine Gaumont es "absolutamente necesario"
Ante la versión de que los actuales dueños de la sala podrían cerrarla,
la Legislatura porteña realizó una audiencia pública para debatir la ley
presentada por el bloque del Frente para la Victoria que impulsa la
declaración de Protección Estructural al edificio del Cine Gaumont, un
espacio donde se difunden películas nacionales.
Actores como Pablo Echarri, Graciela Borges, Ana María Piccio, y directores cinematográficos como Luis Puenzo se reunieron en la legislatura, junto a trabajadores del Espacio INCAA Km 0, para analizar el proyecto de protección al inmueble de Rivadavia 1635.
Según el reglamento parlamentario, una vez que la iniciativa sea discutida con vecinos en la audiencia, retornará al recinto legislativo a fin de su sanción definitiva.
En el escrito, cuyo autor es el legislador Juan Cabandié, se sostiene que "si bien muchos de los cines de nuestra Ciudad han sido cerrados o convertidos a otros usos, el Gaumont ha permanecido, desde su apertura en 1912, como espacio dedicado a la cultura y el esparcimiento ciudadano, siendo testigo de la evolución de la Ciudad".
En este sentido, Echarri remarcó que "es evidente que el inmueble posee valor arquitectónico e histórico-cultural, todo lo cual hace necesaria su preservación", entre otras cosas por su fachada de estilo racionalista que intercala bandas verticales de ladrillos vista con ladrillos de vidrio, lo que permite la iluminación de su vestíbulo.
La sala en cuestión fue inaugurada en 1912 como el "Cine Plaza Congreso", que fuera rebautizado "Cine Gaumont", nombre fue seguramente tomado del "Palace Gaumont", cine parisino abierto en 1911 por León Gaumont, inventor e industrial francés y uno de los pioneros de la industria del cine.
Ubicado en Rivadavia 1635, en el año 2003 es alquilado por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) que lo transforma en el Espacio INCAA Km.0, uno de los más importantes polos para la difusión del cine nacional.
Actores como Pablo Echarri, Graciela Borges, Ana María Piccio, y directores cinematográficos como Luis Puenzo se reunieron en la legislatura, junto a trabajadores del Espacio INCAA Km 0, para analizar el proyecto de protección al inmueble de Rivadavia 1635.
Según el reglamento parlamentario, una vez que la iniciativa sea discutida con vecinos en la audiencia, retornará al recinto legislativo a fin de su sanción definitiva.
En el escrito, cuyo autor es el legislador Juan Cabandié, se sostiene que "si bien muchos de los cines de nuestra Ciudad han sido cerrados o convertidos a otros usos, el Gaumont ha permanecido, desde su apertura en 1912, como espacio dedicado a la cultura y el esparcimiento ciudadano, siendo testigo de la evolución de la Ciudad".
En este sentido, Echarri remarcó que "es evidente que el inmueble posee valor arquitectónico e histórico-cultural, todo lo cual hace necesaria su preservación", entre otras cosas por su fachada de estilo racionalista que intercala bandas verticales de ladrillos vista con ladrillos de vidrio, lo que permite la iluminación de su vestíbulo.
La sala en cuestión fue inaugurada en 1912 como el "Cine Plaza Congreso", que fuera rebautizado "Cine Gaumont", nombre fue seguramente tomado del "Palace Gaumont", cine parisino abierto en 1911 por León Gaumont, inventor e industrial francés y uno de los pioneros de la industria del cine.
Ubicado en Rivadavia 1635, en el año 2003 es alquilado por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) que lo transforma en el Espacio INCAA Km.0, uno de los más importantes polos para la difusión del cine nacional.
miércoles, 25 de abril de 2012
COMUNICADO DE APOYO de la RED ARGENTINA DE DOCUMENTALISTAS al Proyecto de Ley "Por la Protección de la Sala Gaumont y en defensa del Cine Nacional"
Los integrantes de la
Red Argentina de Documentalistas (RAD) apoyamos
el Proyecto de Ley de Protección Estructural del Cine Gaumont, símbolo del cine
nacional. En estos momentos, cuando es necesario asegurar los lugares de
exhibición de nuestras películas (en especial los documentales como reflejo de
la realidad) frente al apetito de las empresas transnacionales, aplaudimos esta
iniciativa y aspiramos a que se multiplique en todo el país, en pos de la preservación
de los espacios de exhibición de nuestra cinematografía, patrimonio cultural de
la nación y MEMORIA AUDIOVISUAL de las generaciones presentes y venideras.
PROYECTO
DE LEY
Art.1º: Catalógase con nivel de protección “Estructural”
en los términos del Artículo 10.3.3, del Capítulo 10.3. “Catalogación” del
Código de Planeamiento Urbano, el inmueble sito en Av. Rivadavia 1635, emplazado
en la sección 5, manzana 9, parcela 28b.
Art.2º: Incorpórase
el inmueble catalogado por el Art. 1º al Listado de Inmuebles Catalogados del
Distrito APH1 Av. de Mayo, contenido en la Sección 10 del Código de
Planeamiento Urbano.
Art.3º: El
Poder Ejecutivo, a través de la Dirección General de Registro de Obras y
Catastro, dependiente del Ministerio de Desarrollo Urbano, deberá asentar en la
Documentación Catastral correspondiente, la catalogación establecida por el
Artículo 1º.
Art.4º: Cúmplase
con lo dispuesto en los artículos 89º y 90º de la Constitución de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires.
Art.5º: Comuníquese,
etc.
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El
presente proyecto propone la catalogación del inmueble donde funciona el
histórico "Cine Gaumont".
En
1907, con la aparición de las primeras películas sonorizadas, el cine ganó
espacio en la vida cultural de nuestra Ciudad, convirtiéndose en una de las
actividades de recreación favoritas de los porteños.
"Entre 1986 y 2010, existieron en
Buenos Aires más de trescientos cines. Fueron espacios creados para la
proyección de películas, otros adaptados a partir de edificios ya existentes
-habitualmente teatros- y otros que compartieron hábilmente sus ámbitos
alternando la proyección con el género en vivo. Así, a lo largo de más de un
siglo, el público porteño acompañó con entusiasmo todas las innovaciones en
materia cinematográfica y asistió con frecuencia tanto a los céntricos palacios
para espectáculos como a los más pequeños cines de barrio, centros sociales se
su vida cotidiana."
Gutiérrez, Ramón en "Cines de Buenos Aires. Patrimonio del
siglo XX", CEDODAL, Buenos Aires, 2010.
En
1912 se inauguró, en el predio donde actualmente se levanta el Cine Gaumont, el
"Cine Plaza Congreso", que fuera rebautizado "Cine Gaumont"
en 1922. Este nombre fue seguramente tomado del "Palace Gaumont",
cine parisino abierto en 1911 por León Gaumont (1864-1946), inventor e industrial francés y uno de
los pioneros de la industria del cine. Paralelamente, esta industria experimentaba en la
Argentina un desarrollo que sería sostenido hasta nuestros días.
Durante las primeras décadas del siglo XX, el lenguaje
utilizado en la arquitectura cinematográfica -que llegó a transformarse en un
programa arquitectónico específico- respondió por un lado al gusto imperante en
la época y, por otro, a la idea del cine como puerta de entrada a un mundo
desconocido, de fantasía. Sin embargo, con la irrupción del racionalismo en
Buenos Aires, tanto su variante academicista, como la funcionalista, dieron a
la Ciudad obras tan notables como el Cine Teatro Opera y el Gran Rex, obra de
los arquitectos Bourdon y Prebisch,
respectivamente, y cuya influencia se extendería a los cines de barrio de
nuestra Ciudad.
Entre 1938 y 1943, se multiplicaron las salas existentes
y el antiguo inmueble
donde
funcionaba el Gaumont fue demolido, construyéndose en su lugar el edificio
actual, de impronta racionalista. Al igual que el Gran Rex, el Gaumont posee un
hall de gran altura en el que se alojan las escaleras que conducen a las
bandejas superiores -convertidas ahora en sendas salas más pequeñas. Este hall
se ve iluminado por la luz que proviene de un gran paño formado por bloques de
vidrio, de doble altura. La marquesina que realza el acceso y el nombre del
cine escrito en grandes letras de neón que corona la fachada, sellan la
inconfundible identidad de su arquitectura.
A medida que la tecnología
avanzaba, se fueron introduciendo modificaciones para mantener las prestaciones
del Cine a tono con las últimas novedades: en 1956 se modificó la pantalla para
permitir presentar el sistema "Cinemascope", caracterizado por el uso
de lentes anamórficos especiales, que posibilitaban cambiar las proporciones de
la imagen utilizada, llevándolas casi al doble de su ancho. Las pantallas
poseían, además, una concavidad que permitía eliminar ciertas distorsiones
propias del sistema.
En 1958 se instaló un nuevo sistema llamado
"Cinerama". Este nuevo sistema, también de pantalla ancha, funciona
proyectando imágenes simultáneamente desde tres proyectores sobre una gran
pantalla curva. La audiencia recibía al momento de la proyección, un par de
anteojos con armazón de cartón y lentes de celofán, uno rojo y otro verde, que
permitían ver las imágenes en relieve.
En 1995, una vez más a partir de modificaciones producidas
en el mercado por el surgimiento de los complejos multisala, el auge de la
televisión por cable y las películas de alquiler, el edificio fue intervenido
para dividirlo en tres salas. La más grande permaneció en la planta
baja
y,
a través de las entradas originales de los palcos, se accede a sendas salas más
pequeñas ubicadas en el primer piso. Si bien esta intervención modificó el
edificio, conservó su disposición general, manteniendo la ubicación central de
la sala principal, el hall de acceso
característico con todos sus elementos, además de los toilettes.
En
el año 2003, el Cine Gaumont fue incluido entre los complejos que forman parte
del Circuito Espacios INCAA, programa del Instituto Nacional de Cine y Artes
Audiovisuales creado con el propósito de garantizar la exhibición de las
producciones cinematográficas argentinas.
En
2008, el Cine Gaumont fue declarado "Testimonio vivo de la memoria
ciudadana", reconocimiento otorgado por el Museo de la Ciudad. Asimismo,
la Ley 1029, sancionada en el año 2003, declaró de interés de la Ciudad de
Buenos Aires a la actividad cinematográfica. Esta misma ley declara también de
interés las salas de cine históricas, siendo éstas las que se encuentran
habilitadas exclusivamente como salas cinematográficas y continúan
desarrollando la misma actividad a la fecha de sanción de la Ley. Entre ellas
se cuenta, indudablemente, el Cine Gaumont.
Si
bien muchos de los cines de nuestra Ciudad han sido cerrados o convertidos a
otros usos, el Gaumont ha permanecido, desde su apertura en 1912, como espacio
dedicado a la cultura y el esparcimiento ciudadano, siendo testigo de la
evolución de la Ciudad.
El edificio en cuestión se
encuentra, además, emplazado en el Área de Protección Histórica Nº 1, dentro
del eje Avenida de Mayo. Este distrito ha sido definido por el Código de
Planeamiento Urbano como aquel que "abarca
ámbitos urbanos de alto significado patrimonial, ya que comprende parte del
antiguo casco histórico, como así también el tradicional eje
cívico-institucional de la Ciudad, ambos articulados por la Plaza de Mayo, la
que forma parte indisoluble de los mismos."
El
mismo Código, en su sección 10, define el valor
arquitectónico copmo los elementos poseedores de calidades de estilo,
composición, materiales, coherencia tipológica y otra particularidad relevante;
en tanto que el valor histórico-cultural,
lo ostentan aquellos elementos testimoniales de una organización social o forma
de vida que configuran la memoria histórica colectiva y un uso social actual.
De acuerdo a estas definiciones, resulta evidente que el inmueble posee valor
arquitectónico e histórico-cultural, todo lo cual hace necesaria su
preservación.
Por todo lo arriba expuesto,
solicito la aprobación del presente proyecto de Ley.
Este miércoles a las 14:30 horas, se realizará una audiencia pública en el Salón San Martín de la Legislatura porteña, con el fin de tratar el proyecto que otorga protección
estructural al Cine Gaumont. El mismo propone considerar a esta sala
histórica, ubicada en el edificio del INCAA ( Instituto Nacional de Cine
y Artes Audiovisuales), edificio de carácter singular y tipológico que
caracteriza su entorno y que representa un testimonio de la memoria de nuestra comunidad.
Para informarnos más sobre el tema, en CONTRAGOLPE, nos comunicamos con Ana Celentano,
secretaria adjunta de la Asosiación Argentina de Actores, que afirmó
que esta protección garantiza que no se pueda cambiar ni la fachada ni
la estructura del cine.
FUENTE: http://www.frecuenciazero.com.ar/index.php/sociedad/3190-audiencia-por-el-cine-gaumont
viernes, 20 de abril de 2012
Las películas mexicanas Post tenebras lux, de Carlos Reygadas y Después de Lucía, de Michel Franco participarán en el 65 Festival de Cannes
Conaculta Cine a través del Instituto Mexicano de Cinematografía informa que el Festival de Cannes dio a conocer hoy su selección oficial, en la que participarán dos películas mexicanas.
Post tenebras lux,
de Carlos Reygadas y producida por NoDream y Mantarraya Producciones,
se estrenará en el festival y competirá por la Palma de Oro junto con 22
películas, entre ellas, Moonrise Kingdom, de Wes Anderson; Cosmopolis,de David Cronenberg; The angels´ share, de Ken Loach; Vous N´avez Encore Rien Vu, de Alain Resnais; On the road de Walter Salles y Thérèse Desqueyroux de Claude Miller.
Asimismo, la cinta mexicana Después de Lucía
de Michel Franco, cuya producción corrió a cargo de Pop Films,
Filmadora Nacional y Lemon Films, se exhibirá en la sección oficial Un Certain Regard,
a la par de 16 películas de países como la India, Colombia, Cuba,
Argentina, Marruecos, Francia, Canadá, Bélgica, Kazajistán, Senegal,
Japón y Estados Unidos.
Post Tenebras Luz,
cuenta la historia de Juan y su joven familia, retratando su vida en el
campo de México. Ahí disfrutan y sufren un mundo que entiende la vida
de otra forma. Juan se pregunta si estos mundos se complementan o, en
realidad, luchan inconscientemente por eliminarse el uno al otro.
Con su tercera participación en competencia oficial, Reygadas ganó en 2007 el premio del Jurado con su película Stellet Licht (Luz silenciosa). Asimismo, en 2002 con Japón, fue seleccionado en la Quincena de realizadores.
"Me siento muy agradecido con el Festival de Cannes por haber invitado a Post Tenebras Lux
lo que contribuye a lograr una mayor difusión internacional de la
película. Espero poder estrenarla en México en otoño. Y una felicitación
a mi colega Michel Franco que irá a Un Certain Regard" afirmó Reygadas.
Después de Lucía,
narra la historia de Roberto quien enviudó y ha descuidado a su hija
Alejandra de quince años. Sumido en su depresión decide mudarse a la
ciudad de México. En la nueva escuela, la chica tolerará en silencio
abusos emocionales, sexuales y humillaciones de todo tipo con tal de no
llevar problemas a casa. Padre e hija se separan cada vez más, la
violencia está presente en todos los aspectos de sus vidas.
Michel Franco fue seleccionado por segunda ocasión en Cannes, ya que en 2009 participó con su película Daniel y Ana en la Quincena de Realizadores.
Para Franco Despúes de Lucía habla sobre la violencia que se vive cotidianamente en las escuelas, en la calle, en entornos laborales y familiares “estoy
seguro de que la participación en la selección oficial de Cannes,
ayudará a que tenga una mayor distribución en México y a nivel
internacional. Lo más importante de la selección, es que me anima a
seguir escribiendo y filmando películas, estoy muy emocionado” y continuó diciendo “soy un admirador del cine de Carlos Reygadas, espero poder ver su nueva película en el festival.”
En total, México ha ganado 19 premios en Cannes, entre los que se encuentran películas como Los olvidados, Macario, El héroe, Luz silenciosa, El violín, el cortometraje Ver llover y recientemente, Año Bisiesto, ganadora de la primera "Cámara de Oro" para el cine mexicano. El Festival de Cannes se celebrará del 16 al 27 de mayo.
El prestigioso encuentro mundial del séptimo arte comenzará el próximo
16 de mayo y culminará el 27 del mismo mes. Y esta vez se cuenta con una
nutrida participación latinoamericana.
Films latinoamericanos en el Festival de Cannes
El prestigioso encuentro mundial del séptimo arte comenzará el próximo
16 de mayo y culminará el 27 del mismo mes. Y esta vez se cuenta con una
nutrida participación latinoamericana.
El brasileño Walter
Salles peleará por la palma de oro con su película "En el Camino", entre
los nominados también está "Post Tenebras Lux" del mexicano Carlos
Reygadas, quien ya obtuvo un premio en el año 2007.
También hay
otro mexicano que llega a Cannes. Michel Franco participa con "Después
de Lucía" en la sección Una cierta Mirada, donde figuran otras películas
de Cuba, Argentina y Colombia.
El argentino Pablo Trapero ya ha
participado en otras ediciones del Festival de Cannes, y este año vuelve
con su film "Elefante Blanco". Un largometraje coproducido por
Argentina y Francia y con Ricardo Darin como protagonista.
Colombia
estará presente en la figura de Juan Andrés Arango, quien participa con
su película "La Playa". También está representada Cuba con "7 días en
la Habana", film colectivo dirigido por siete directores y formado por
siete partes distintas.
Mayor información en www.festival-cannes.com/en.html
jueves, 19 de abril de 2012
BAFICI 2012
"La araña vampiro"
Un joven con su padre. Un viaje a un lugar aislado para buscar tranquilidad porque el joven tiene ataques de pánico. Una cabaña y un aislamiento (y un actor, Alejandro Awada) que remiten a El aura de Fabián Bielinsky. También la falta de adaptación del joven urbano al lugar “salvaje”. Para peor, y para detonar el viaje dentro del viaje, aparece una araña grande y amenazante. El título del film adelanta que esta araña no es cualquier araña. Y el film de Medina, como ocurría con Los paranoicos, no es cualquier film en el contexto del cine argentino. Medina es un narrador convencido y consumado. Y coherente. Cambia de espacio, pero su héroe permanece. Es, al menos hasta este segundo film, uno clásico, de esos que deben probar su valía, sobreponerse a circunstancias que los superan. Así, el joven de los ataques de pánico deberá luchar contra los efectos de la araña, en un viaje por la montaña con un baqueano en el que tendrá que confiar porque no le queda otra alternativa. Viaje, buddy movie, ciencia ficción, coming of age, aventura. A Medina le gustan los géneros. Bienvenido, otra vez, ese gusto.
"Germania"
En un pequeño pueblo de Entre Ríos, una familia de alemanes se prepara para abandonar su granja, por motivos que tardarán en revelarse. El último día, los dos hermanos adolescentes, Brenda y Lucas, se despiden de sus amigos mientras la madre termina de desmontar la casa. Pero esa despedida está lejos de poner en palabras y hechos evidentes lo que marca la vida y el drama de sus protagonistas. Volviendo al escenario y al tono de su cortometraje Invernario, Maximiliano Schonfeld elude el lugar común del relato costumbrista y nos interna en un mundo áspero, que siempre deja ver más de lo que muestra. El fin de la adolescencia, el deseo sexual, el resquebrajamiento de la noción de familia y las relaciones de clase son algunos de los ejes que despliega, sin alzar la voz ni señalarnos lo que debemos pensar o sentir. Mucho contribuye a este realismo opaco, matizado por una luz opalescente, la verdad de sus actores no actores, especialmente la belleza teñida de sombras de Brenda Krütli y la mirada y el gesto rústico de Lucas Schell.
"Los salvajes"
Como en un western, todo empieza con un grupo que se fuga, aunque no de la prisión del sheriff sino de un instituto de menores, y que debe hacer un extenso periplo a pie en busca de un lugar, de su lugar. Ellos son Gaucho, Simón, Grace, Monzón y Demián, y para sobrevivir tienen que cazar, robar, hacer valer sus saberes y sus creencias, buscar el rumbo y perderlo y reencontrarlo, controlar sus impulsos, funcionar como equipo. La potencia de Los salvajes está en el talento de Fadel para avanzar en un relato coral sin perder las singularidades de sus intensos personajes; para hacer del espacio un personaje denso y lírico, a la vez material y simbólico, local y universal; para honrar y trascender los tópicos de los géneros clásicos; y para modelar la temporalidad de la narración, comprimiendo y expandiendo, yendo y viniendo de la vibración a la epifanía, ayudado por sus inolvidables personajes, inolvidables actores. Los salvajes está destinada a permanecer.
3 MILLONES, DOCUMENTAL CODIRIGIDO POR JAIME Y YAMANDU ROOS
Padre e hijo detrás de la Celeste
La película es el relato de un vínculo, un diario de viaje y una road movie con algunos personajes soberbios.
Por Juan Pablo Cinelli
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/5-24939-2012-04-19.html
El
cine es un ritual en el que sus fanáticos se juntan en una platea a
disfrutar de su pasión. Quien ama el cine lo hace sin condiciones, en
las buenas y en las malas, y por eso sus seguidores son capaces de
volver a insistir siempre una vez más, incluso tras haber visto una
película horrible. El fanático del cine puede incluso llegar a los
extremos de ser patotero y peleador en defensa de los colores de “Su
Cine”. Cualquiera que conozca el paño sabe que no es raro cruzarse con
algún barrabrava que siempre pretende imponer por la fuerza sus gustos y
ardores estéticos. Casi como un hincha de fútbol. 3 millones, la
inesperada pero bienvenida película que Jaime Roos dirigió con su hijo
Yamandú, siguiendo la campaña de la selección uruguaya de fútbol durante
el Mundial de Sudáfrica, consigue reunir en un mismo objeto ambas
pasiones del mejor modo posible. Es decir, 3 millones no es sólo una
película sobre fútbol sino, ante todo, una película. Y todo el que
padezca una pasión (el fútbol) o la otra (el cine,) sin dudas disfrutará
de este recorrido múltiple que imaginaron los Roos.
3 millones tiene la virtud de ser mucho más que un documental sobre la exitosa participación uruguaya en el Mundial de Sudáfrica. Sí sólo fuera eso sería como ver Fox Sports en pantalla gigante y difícilmente alguien pueda imaginar una tortura más terrible. Pero no. Montada fuertemente sobre ese eje, la película de los Roos es además el relato de un vínculo, diario de viaje de un padre con su hijo y road movie con algunos personajes soberbios. Entre ellos el más atractivo es Yamandú: divertido y seductor, el hijo de Roos recorre la película (y Sudáfrica de punta a punta) tan preocupado por el fútbol como por conseguir chicas, piropeando a cuanta mujer hermosa se le cruza y obteniendo casi siempre el premio de prometedoras sonrisas.
Más interesado en la campaña celeste, Jaime se encarga de los textos y, ante los múltiples intereses de su hijo, de aportar el anclaje futbolero y musical de la película. Es él quien deja claro al comienzo que si a un Mundial no se va con la ilusión de ganarlo es mejor no ir; pero también quien, sobre el final, no oculta el orgullo de haber llegado lejos respetando una tradición. Toda la película transcurre basculando entre ese deseo de triunfo y la satisfacción del orgullo por lo propio, dos fuerzas en tensión que los directores consiguen mantener en permanente equilibrio. En los textos que el músico escribió para la película se percibe además cierto aire a la prosa de otro hincha celeste, el Eduardo Galeano de El fútbol a sol y sombra, libro del autor dedicado a ese deporte. En una de sus mejores frases, que tiene sentido ya desde el título, Roos dice con resignación durante uno de los siete partidos disputados por Uruguay en Sudáfrica: “Como siempre, somos visitantes”, aludiendo a ese paisito con apenas tres millones de habitantes, pero dueño de una de las historias más ricas del fútbol.
En cuanto a lo estrictamente futbolístico, 3 millones tiene algunas interesantes imágenes exclusivas tomadas por Yamandú (quien asistió al mundial acreditado como fotógrafo y vio todos los partidos dentro de la cancha), incluyendo videos y sobre todo fotos de una potencia envidiable y elocuente. A él también pertenecen algunas tomas realizadas por toda Sudáfrica, incluyendo algunas bellísimas de los barrios más humildes de aquel país, que ni el propio padre se explica cómo consiguió. Por tantos motivos puede decirse que 3 millones es una película de ruta y, además, el relato épico acerca de las hazañas de un gran equipo de fútbol.
3 MILLONES
Uruguay, 2012.
Dirección: Jaime y Yamandú Roos.
Guión y música: Jaime Roos.
Fotografía: Yamandú Roos.
Intérpretes: Jaime y Yamandú Roos y la selección uruguaya de fútbol.
SE PUSO EN MARCHA AYER TECNOPOLIS TV, CON CONTENIDOS CIENTIFICOS Y TECNOLOGICOS
Ciencia en TV, apta para todo público
El nuevo canal puede verse por la Televisión Digital
Abierta (TDA). Apunta a desmitificar la imagen acartonada de la ciencia
y difundir la producción científica local. Transmite durante las 24
horas programas locales e internacionales.
Por Eduardo Videla
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-192213-2012-04-19.html
“Es
el primer canal (de televisión) de habla hispana con contenidos
científicos”, definió la presidenta Cristina Fernández de Kirchner al
poner en el aire la señal digital de TEC-Tecnópolis TV.
El nuevo canal
podrá verse por el sistema de televisión digital abierta (TDA) en alta
calidad (HD), durante las 24 horas, con programación nacional e
internacional. Está destinado a “la difusión de la ciencia, la
tecnología y la industria nacional” o, en palabras de la Presidenta, a
“mostrar todo lo que somos capaces de hacer”. CFK también anunció que la
muestra Tecnópolis volverá a abrir en julio, antes de las vacaciones de
invierno, y adelantó el inminente lanzamiento de un canal deportivo que
pertenecerá al sistema público de medios, que transmitirá los Juegos
Olímpicos de Londres 2012, también por TDA.
La puesta en marcha del canal TEC se hizo en el predio ferial de
Villa Martelli, desactivado a la espera de su reapertura. Allí se había
acondicionado para la ocasión un enorme espacio cubierto, con numerosas
pantallas led y toda la parafernalia Tecnópolis: malabaristas y
personajes galácticos que amenizaron la espera.
“No queremos ser un país consumidor de conocimiento sino productor
de conocimiento”, definió la Presidenta. A las 18.25, pasó la mano por
una pantalla interactiva y así, como en un pase de magia, la
programación que venía transmitiendo en señal de prueba llegó a los
usuarios a través del canal 2025. Todavía no puede verse en señales de
cable ni en la televisión satelital comercial.
La programación apunta a desmitificar la imagen de la ciencia como
una materia aburrida y para pocos. Cuenta con un ciclo de entrevistas
con científicos, a cargo del doctor en biología e investigador del
Conicet Diego Golombek; una serie en que el matemático y periodista
Adrián Paenza explica el vínculo entre la matemática y el sufragio; una
serie de ficción donde, bajo el título de Area 23, un grupo de
científicos –con el protagónico de la actriz Carolina Peleritti– se
lanza a la investigación en un banco de datos genéticos; y un programa
sobre los logros de mujeres científicas, a cargo de la periodista
Mariana Carbajal. El software ligado al entretenimiento también tiene su
lugar, con los programas Muchas mentes y 4D; en tanto que La ciencia en
juego indagará acerca del papel que lo lúdico tiene en las conductas de
las personas. También contiene ciclos de cine de ciencia ficción, un
programa para acercar la figura del científico a partir del relato de su
vida, y un ciclo con la actualidad de empresas dedicadas a la
tecnología en Argentina.
La emisión de TEC es el producto del trabajo conjunto de los
ministerios de Ciencia y Tecnología y de Educación y de la Unidad
Ejecutora Bicentenario. El grueso del material se produce en el Espacio
para la Memoria ubicado en la ex ESMA, donde también se genera la
programación del canal Encuentro. Ayer mismo, la Presidenta anunció el
llamado a un concurso para la realización de quince series que se
agregarán a la programación, para lo cual se destinarán 28 millones de
pesos.
La pantalla de TEC-Tecnópolis TV se complementará con su web, que
“vinculará las nuevas tecnologías de la información y la comunicación
para potenciar ambos medios y generar un espacio de convergencia”.
La Presidenta estuvo acompañada por el jefe de Gabinete, Juan Manuel
Abal Medina; los ministros de Ciencia, Lino Barañao; de Educación,
Alberto Sileoni; de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; y de Industria,
Débora Giorgi; y los gobernadores de Buenos Aires, Daniel Scioli, y de
Tucumán, José Alperovich. Entre los invitados, muchos de ellos
científicos, se hizo presente una columna de jóvenes con banderas de La
Cámpora de Vicente López y de Tigre.
Antes de poner en marcha el nuevo canal, Cristina inauguró la
conexión del sistema de TDA con las bases argentinas en la Antártida.
Hubo una conexión por videoconferencia con los militares y científicos
que trabajan en una de las bases. Después de destacar el trabajo de este
personal, la Presidenta les preguntó si estaban allí con sus familias,
con sus esposas o si estaban solos. Los hombres se limitaron a mostrar
con la cámara al resto del equipo, en torno de una mesa. “Son todos
hombres –observó Cristina–. Y están tomando mate. Seguro que no llegó
allí el aumento de la yerba”, les dijo. “Bueno, mejor no pregunto más
así no meto la pata”, remató, olvidando que el interrogante no le fue
respondido en palabras sino con una imagen.
miércoles, 18 de abril de 2012
Protección Cultural del Cine Gaumont "Por la Protección de la Sala Gaumont y en defensa del Cine Nacional"
El
INSTITUTO NACIONAL DE CINE Y ARTES AUDIOVISUALES tiene el agrado de
invitarlo a participar de la AUDIENCIA PÚBLICA a realizarse en la
Legislatura de la ciudad de Buenos Aires, en la cual se tratará el tema
de la Protección Estructural al CINE GAUMONT.
El
Proyecto de Ley que se tramita por expediente Nº 1982/2011 y que cuenta
con sanción inicial, fue presentado por Iniciativa del presidente del
bloque del Frente para la Victoria, Legislador Juan Cabandié, acompañado
por la mayoría de las fuerza representadas y con apoyo de los vecinos
organizados por la defensa y recuperación de Salas de nuestra ciudad, y
propone considerar a esta sala histórica, edificio de carácter singular y
tipológico que caracteriza su entorno y que representa un testimonio de la memoria de nuestra comunidad.
La audiencia se llevará a cabo el próximo 25 de abril a las 14:30 hs. en el Salón San Martín de la Legislatura porteña. La misma constituye una instancia de participación ciudadana en el proceso legislativo que permite a todos los interesados expresar su opinión en defensa del CINE GAUMONT, edificio histórico de la ciudad, actualmente, de propiedad privada, alquilado por el INCAA, con contrato vigente hasta el año 2013.
La audiencia se llevará a cabo el próximo 25 de abril a las 14:30 hs. en el Salón San Martín de la Legislatura porteña. La misma constituye una instancia de participación ciudadana en el proceso legislativo que permite a todos los interesados expresar su opinión en defensa del CINE GAUMONT, edificio histórico de la ciudad, actualmente, de propiedad privada, alquilado por el INCAA, con contrato vigente hasta el año 2013.
Quienes
estén interesados en hacer uso de la palabra durante la Audiencia
deberán registrarse personalmente hasta las 14:30 hs. del día 20 de
abril . De necesitar asistencia con dicha inscripción pueden comunicarse
con Eva Prado (15-6419-9289 eva.prado@incaa.gov.ar) y Paula Morel (15-6419-9309 paula.morel@incaa.gov.ar)
Para contactarse con la Legislatura en la Dirección de Participación Ciudadana. al tel.: 4338-3151 E-mail: dg.gypciudadana@legislatura.gov.ar .
"Por la Protección de la Sala Gaumont y en defensa del Cine Nacional"
Esperamos poder contar con su presencia.
Saludos cordiales.
miércoles, 11 de abril de 2012
HOY ARRANCA UNA NUEVA EDICION DEL BAFICI
Un radar en busca del cine nuevo, desconocido y valioso
Además de los grandes nombres (Herzog, Bruno Dumont,
Guy Maddin, Hong Sang-soo), el festival, como siempre, se aventura en
terra incognita, con más de 400 films, entre largos y cortos. El cine
argentino tiene un lugar preponderante.
Por Horacio Bernades
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/5-24867-2012-04-11.html
“Este
14º Bafici busca profundizar su radar para captar lo que es desconocido
y valioso”, escribe Sergio Wolf, su director artístico, en la tercera
línea de la página 4 del catálogo oficial del festival. Sin que
constituya publicidad encubierta del suplemento cultural de Página/12,
el radar del que habla Wolf –que con cinco años en funciones es ya el
más longevo director del festival porteño– es el mismo que el Bafici
conecta todos los años a esta altura. Uno que capta ondas
cinematográficas que vienen de lejos, pero también desde muy cerca. Y
que, como el de los murciélagos, apunta a reemplazar la ceguera de la
cartelera cinematográfica por la puesta en marcha de un
electromagnetismo que año a año se renueva, durante once días y una
noche. Electromagnetismo que a fines de abril volverá a interrumpirse,
como todas las temporadas, cuando las salas vuelvan a exhalar el
inconfundible aroma del pochoclo. Y que este año se acciona, en forma
oficial, hoy a las 19 (mañana a la mañana, para todo el mundo),
manteniéndose encendido hasta el domingo 22 a última hora. El lunes 23, a
volver al trabajo. Al trabajo del cine corriente.
Un festival muy competitivo
Como de costumbre, el Bafici presentará tres secciones competitivas, incluyendo Cine del Futuro. Llama la atención, y algo debe querer decir, que la Competencia Internacional haya bajado de las diecinueve películas de la edición anterior a las quince de ésta. Lo contrario sucede con la Competencia Argentina, que de las doce del año pasado crece a las catorce de este año. ¿Una cosecha internacional algo más débil, una local más sustanciosa que en años anteriores? Ambas cosas están por verse, pero la segunda conjetura tiene ya un abanderado: el propio Wolf, que proclama a viva voz, en el catálogo del festival, que “el cine argentino tiene una fortaleza extraordinaria en esta edición”. De ser así, será bienvenido: la selección argentina (con perdón por las resonancias futbolísticas) fue, en las últimas ediciones, uno de los puntos débiles del Bafici. Con lo cual podría pensarse que tal vez el diagnóstico de monsieur Frémaux haya sido correcto, pero atrase. Ojalá sea así.El cine argentino viene pidiendo pista ya desde la misma Competencia Internacional, con tres películas de las que se habla bien desde antes de su presentación (con lo poco o mucho que esto puede querer decir). Dos de ellas presentan curiosos paralelismos temáticos. Opus dos de Gabriel Medina después de Los paranoicos, La araña vampiro presenta a un chico de ciudad viviendo sus peores terrores en medio de la naturaleza. Terrores que se encarnan en el ser (¿real o fantaseado?) del título. En Los salvajes, primer film en solitario de Alejandro Fadel (correalizador de El amor, primera parte; coguionista de los últimos films de Pablo Trapero), un grupo de jóvenes evadidos debe ponerse a prueba, a lo largo de un extenso viaje. Opera prima de Mariano Schonfeld, Germania tampoco transcurre en Buenos Aires, sino en una comunidad alemana de la provincia de Entre Ríos.
De las restantes participantes de Competencia Internacional –donde habrá dos películas chilenas, lo cual es inédito– puede decirse que la israelí Policeman, sobre un miembro de un grupo especial de la policía, viene muy recomendada; la australiana Snowtown, sobre una serie de crímenes seriales cometidos en un pequeño pueblito diez años atrás, pinta revulsiva; la francesa Tomboy, sobre una nena que se hace pasar por nene, recibe recomendaciones y la serbia Clip aborda sin medias lenguas el sexo adolescente, mientras que The International Sign for Choking presenta la curiosidad de que su realizador, el estadounidense Zach Weintraub, la filmó en Argentina. ¿Cuándo? En abril del año pasado, cuando vino a presentar su ópera prima, la muy buena Bummer Summer... en Competencia Internacional del Bafici 2011.
¿Argentina, Argentina?
Con su habitual combinación de films narrativos y otros más experimentales, audaces o personales, la Competencia Argentina presenta una segunda cruza: la de veteranos y recién llegados. Cuando se habla de veteranos no se trata de edad, sino de historia propia en el festival. La referencia es para Luis Ortega, Inés de Oliveira Cézar, José Luis García, Gonzalo Castro, Jonathan Perel, Gastón Solnicki y los hermanos Levy. Diez años después de Caja negra y tras algunos tambaleos, con Dromómanos Luis Ortega retoma, según se adelanta, el heterodoxo minimalismo lírico de aquélla. En Cassandra, Oliveira Cézar vuelve a trasponer la tragedia griega a tiempos contemporáneos, como había hecho en Extranjera y El recuento de los daños. José Luis García, que en el Bafici 2005 deslumbró con su documental de creación Cándido López, los campos de batalla, presenta ahora La chica del sur, filmada en un territorio que no registra antecedentes para el cine argentino: la frontera entre Corea del Norte y Corea del Sur.
Lo de Gonzalo Castro es un record: todas sus películas se presentaron en el Bafici. En este caso se trata de Dioramas, cuarta presentación al hilo en el festival después de Resfriada, Cocina e Invernadero. Podría considerarse a 17 monumentos, de Jonathan Perel, una ampliación de la anterior El predio: allí registraba las huellas edilicias de la ESMA, aquí hace lo propio con la cantidad de campos de concentración de la dictadura que el título numera. Luego de süden (Bafici 2008), en Papirosen Gastón Solnicki logra armar toda una novela familiar, usando como único material filmaciones de las que suelen llamarse “sociales”. Masterplan representa la primera incursión en la ficción de Pablo y Diego Levy, que participaron de la edición 2011 del Bafici con el documental Novias-Madrinas-15 años. Entre los “nuevos” hay una clara preferencia por las historias de iniciación a ritmo de rock, rubro al que pueden adscribirse Al cielo, El espacio entre los dos, Igual si llueve y Mis sucios 3 tonos.
Una de las que se sale del molde “iniciación rocker” es Ante la ley, ambicioso collage sobre uno de los autores más malditos de la historia literaria argentina y sobre el más maldito de sus libros: La narración de la historia, de Carlos Correas, prohibido a fines de los ‘50 por su transcripción, a calzón literalmente quitado, de ritos y costumbres de la cultura gay de la época. Otras, Salsipuedes (la nueva perla cordobesa, luego de De caravana, propagan sus promotores) y Villegas, tal vez lo más parecido a la nunca bien ponderada “película-FUC” que presenta esta edición del Bafici.
De acá para allá
El cine argentino no termina en la Competencia Argentina. En distintas paralelas van a estar, entre otras, las nuevas de Raúl Perrone (Las pibas), Edgardo Cozarinsky (Nocturnos), Celina Murga (Escuela normal), Gustavo Fontán (La casa) y Ulises Rosell (El etnógrafo). Además de un montón de óperas primas, desde ya. Pero como no todo es cine argentino en el mundo del cine, la grilla del Bafici vuelve a presentar este año un amplísimo panorama de la producción internacional, así como una cantidad de focos casi igual de amplia.
Dentro del Panorama, la sección Trayectorias amucha, como de costumbre, los grandes nombres del cine de autor, desde Werner Herzog (Death Row, su documental más reciente, agotó ya sus entradas) hasta el gran Eduardo Coutinho (dicen que As cançôes es una maravilla). Entre uno y otro, Raya Martin con Buenas noches, España, Hong Sang-soo con The Day He Arrives, el simpático de Bruno Dumont con Hors Satan, Jafar Panahi con This is Not a Film, Manuel Gomes con Tabú, Guy Ma-ddin con Keyhole y siguen las firmas. Siempre dentro del gigantesco Panorama, a las subsecciones tradicionales (La Tierra Tiembla, Música, Nocturna) se les suman este año algunas ad hoc. La Ley del Deseo reúne películas sobre o con sexo; Imágenes Paganas, herejías varias; Odiseas del espacio, las que vinculan cine y arquitectura, mientras que Album Familiar y Adolescencias no requieren mayores explicaciones.
Los focos crecen como hongos: diez años atrás eran un puñadito; al día de hoy suman dieciséis. Hay uno dedicado a Edgardo Cozarinsky, otro a Narcisa Hirsch, pionera del cine experimental argentino, y el de Tomas Alfredson (realizador de Criatura de la noche y la reciente versión de El topo). El foco dedicado a la Viennale (500 aniversario de ese magno festival de cine de arte) permitirá ver o rever películas de Wes Anderson (Bottle Rocket, 1996), Agnès Varda (Lions Love, 1969), Ross McElwee (Sherman’s March, 1986). El resto promueve el descubrimiento, trátese de los brasileños trash de Boca do Lixo, el refinado británico Grant Gee, el taiwanés Wei Te-sheng o los indies Zellner Brothers. En una palabra, profundizar el radar (si los radares fueran acaso profundizables) para captar lo que es desconocido y valioso. Como todos los años, o tal vez más.
Comunicando la Universidad
Alejo García advierte sobre la necesidad de que la Universidad repiense sus prácticas en comunicación con la sociedad.
Por Alejo García *
http://www.pagina12.com.ar/diario/laventana/26-191588-2012-04-11.html
El filósofo y teólogo Rubén Dri, en una investigación publicada luego de la crisis del año 2001 sobre el surgimiento de las asambleas barriales y los movimientos sociales, decía “La alienación de la Universidad en relación con la sociedad tiene notorias semejanzas con las de la Iglesia”.
¿Cuál es hoy el rol de los docentes e investigadores universitarios? ¿Es posible pensar la formación académica por fuera del contexto latinoamericano actual? En tiempos donde se habla de “periodismo militante”, de la posición subjetiva de quienes tienen la tarea de comunicar, ¿se puede pensar en la idea de investigadores o profesionales militantes? ¿Es posible construir una mirada “objetiva” en las Ciencias Sociales?
La trabajadora social Alicia Negri plantea que “la educación popular en las aulas universitarias permitiría el ‘encuentro’ entre los saberes de docentes y estudiantes, en un trabajo cooperativo que potencie las posibilidades de decir nuestra ‘propia palabra’, en la tarea de formarnos como productores de conocimiento crítico y no como simples consumidores condenados a la repetición”.
El especialista en comunicación e investigador universitario Jorge Huergo se pregunta “¿Cómo volvemos a comunicar la Universidad con la comunidad de la que formamos parte? Tenemos que dejar de pensar la academia fuera, y esto no se resuelve sólo en la militancia. ¿Cómo la Universidad se comunica con los movimientos de la complejidad cultural y la conflictividad social, en diálogo con la construcción de saber popular y de poder popular? Para esto, debemos alentar procesos de curiosidad, de elaboración de preguntas y de búsqueda ‘con’ esos movimientos y esas organizaciones, y no ‘para’ ellos o por fuera de ellos’”.
La recuperación del sentido de la formación universitaria estará dada en poder recuperar la direccionalidad política de la educación popular, es decir en construir conocimiento con sus comunidades para incidir en las políticas sociales con perspectiva local pero también latinoamericana.
El concepto del “pensar situado” del que hablaba el filósofo argentino Rodolfo Kusch debería volver a ocupar hoy un lugar en las aulas y sobre todo teniendo en cuenta la gran cantidad de nuevas casas de estudio que se han creado en los últimos años en varios partidos del conurbano bonaerense y que permiten que miles de jóvenes accedan a ellas, siendo los primeros universitarios de sus familias.
En otras palabras, la Universidad podría atravesar el desafío de pensar lo cotidiano sin hacer “seguidismo intelectual” a los autores de moda para hacerlo desde un enfoque latinoamericano y animarse a intervenir y comunicar esas reflexiones que surjan de la interacción con la comunidad e incidir así políticamente modificando la calidad de vida de la población.
Las luchas de los movimientos sociales, los organismos de derechos humanos, las centrales sindicales y las organizaciones de la sociedad civil en general deben contar con vasos articulantes que comuniquen esas prácticas defensoras de los derechos del hombre, siendo ese el campo donde la universidad encontrara su función de ser.
El sacerdote jesuita José “Pichi” Meisegeier, que vivió hasta sus últimos días trabajando junto a los vecinos de la Villa 31 de Retiro, decía en una de sus últimas apariciones públicas en la Universidad Popular de las Madres que la Universidad tiene su responsabilidad social en formar cuadros técnicos, profesionales que cuenten con las herramientas para acompañar los procesos de organización de los que menos tienen.
Entendemos que ese es el desafío actual de las universidades, su opción preferencial por los pobres, por los lugares adonde el Estado no llega y animarse a formar profesionales desde una dimensión ético-política enmarcada en lo que Carlos Eroles definía como “una praxis social de los derechos humanos”.
O como decía Ernesto Guevara en su discurso al recibir el premio Honoris Causa en la Universidad Central de las Villas: “Y el pueblo que ha triunfado, que está hasta malcriado en el triunfo, que conoce su fuerza y se sabe arrollador, está hoy a las puertas de la Universidad, y la Universidad debe ser flexible, pintarse de negro, de mulato, de obrero, de campesino, o quedarse sin puertas, y el pueblo la romperá y él pintará la Universidad con los colores que le parezca”.
* Licenciado en Trabajo Social, docente universitario.
martes, 10 de abril de 2012
TIM ROBBINS ANTE EL ESTRENO DE 1984 EN EL TEATRO SAN MARTIN
“Esta obra es más relevante hoy que cuando se publicó”
El actor y director estadounidense presenta la adaptación teatral de la clásica novela de George Orwell, con la interpretación de su grupo The Actors’ Gang. “Me interesaba hacer el recorrido por Sudamérica ya que acá está muy presente el recuerdo de las dictaduras”, dice.
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/10-24855-2012-04-10.html
Por Ezequiel Boetti
El texto de 1984 es como un buen vino tinto: el paso del tiempo no sólo no reduce un ápice su calidad sino que, por el contrario, le sienta de maravillas, aumentando sus tonalidades y amplificando los matices. Tanto es así que una lectura a la luz de la actual coyuntura social, cultural y política mundial deja como saldo la imposibilidad de creerle al opus máximo del británico George Orwell sus 64 velitas. Cabría preguntarse, entonces, cómo trasponer su temática, implacable en la resma, a una obra teatral; cómo aprehender sus conceptos esenciales, cómo recorrer sus vericuetos. Las respuestas se verán desde el jueves hasta el sábado a las 20.30 en la Sala Martín Coronado del Teatro San Martín (Corrientes 1530), cuando desembarque la adaptación dirigida por el actor estadounidense Tim Robbins e interpretada por su grupo de teatro. El protagonista de Río Místico pasó por la Argentina para presentar la obra, dictar un seminario para actores y acompañar la retrospectiva de sus principales películas que culmina hoy en la Sala Lugones del mismo complejo.
Su vínculo con la adaptación del libro de Orwell se remonta hasta 2005, cuando palabras como Guantánamo o Abu Ghraib recién asomaban en el vocabulario cotidiano de la sociedad estadounidense.
Ese año tomó el guión Michael Gene Sullivan, mandamás de una compañía teatral de San Francisco, pero encontró cambios notorios respecto del texto original. O al menos eso creyó, hasta que volvió a las fuentes. Ahí no sólo reconfirmó que la esencia orwelliana estaba más vigente que nunca, sino que la fidelidad de Sullivan había sido prácticamente total. “Es una adaptación volcada sobre todo al contenido y no tanto a lo visual. Es imposible hacerlo de otra forma, más con nuestro presupuesto. Soy un gran creyente del teatro simple y no me gusta mucho el que prioriza lo escenográfico. Me parece buenísimo que el teatro funcione como un lugar para relajarse y divertirse; es muy legítimo, pero a mí me interesa más lo visceral. Sin embargo, desde el principio pensé en no encerrarme demasiado. No me gusta cuando una obra pone un muro y se convierte en un acto intelectual. No importa el formato, siempre tiene que ser una forma de encuentro con el público. Respecto de la puesta, obviamente hay que ver la obra para saber cómo la adapté. Sólo puedo decir que traté de encontrar la esencia y de concentrarme en los actores”, adelanta más tarde Robbins en la entrevista con Página/12.
Ya con el visto bueno de Sullivan y el actor, sólo quedaba poner el flamante texto al servicio del grupo teatral fundado por el protagonista de Sueños de libertad hace más de tres décadas, The Actors’ Gang (así, con apóstrofe después de la “s”). “La empecé con un grupo de amigos en la Universidad de California, en Los Angeles. Nuestras obras siempre se basaron más en la tradición europea que en la realista norteamericana. Siento una gran admiración por los actores de nuestra tradición, pero creo que funciona mejor en el cine. Nosotros estamos interesados en hacer un teatro que trate sobre las grandes ideas, que refleje la condición humana en el mundo contemporáneo y que nos haga preguntarnos acerca de él”, recordó antes de abordar su acepción personal sobre el trabajo en las tablas. “Es una experiencia distinta a todas; una comunidad construida junto a extraños durante dos o tres horas. Es la única forma de arte que no se puede robar de Internet, lo que hace que el teatro sea algo cada vez más vital para la sociedad. Cuando las posibilidades de tener un contenido adulto y maduro disminuyen en el cine, crecen en el teatro”, reflexiona el actor, quien llegó a la Argentina luego de su paso por el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, que culminó el domingo.
Pero el teatro, asegura, también se trata de una forma de “mantenerse honesto” más allá del reconocimiento. Es que si bien Robbins lleva más de treinta años al mando de su grupo, sus más de 190 centímetros de altura son mundialmente conocidos por sus trabajos cinematográficos (ganó un Oscar como actor de reparto por Río Místico a comienzos de 2004) y su matrimonio durante 23 años con Susan Sarandon, de quien se separó en 2009. “Muchas veces hacerse famoso implica un aura de superficialidad muy grande que hace perder el foco y uno empieza a creerse la imagen que construyen los otros sobre uno y a perder el vínculo con el público. Lo más cercano es pasar por la alfombra roja y saludar. Entonces nada te pone más los pies sobre la Tierra que el teatro. Hay que estar presente, sumergido en el personaje y ser muy humilde para lograr eso”, reflexiona el actor.
–Existen dos películas previas de 1984, una de 1956 y otra realizada justamente en el año 1984. ¿Le sirvieron de alguna forma inspiración visual?
–No he visto las dos, sólo una. Creo que no es la forma en la que yo la hubiera hecho. Para mí es demasiado gris y muy oscura. Cuando Orwell habla de las telepantallas luminosas, eso es un entretenimiento muy vistoso, así que yo hubiera creado un mundo más claro y brillante. Creo que una de las cosas más interesantes es ver cómo puede existir un mundo distópico aun con las imágenes vistosas que él creó.
–¿Comparte la visión pesimista sobre el futuro que propone el libro?
–No creo que sea pesimista. Si uno lee el apéndice se dará cuenta de que no es así. El lo puso ahí por una razón. Esa parte del libro está escrita en un tiempo verbal que sugiere un futuro y que aún no sucedió todo o que no funcionó y que no pudieron obtener el control total. El concepto de libertad sobrevive a los censores. Generalmente, cuando el novelista termina, termina. Pero acá no. En el apéndice cita solamente a una persona, que es Thomas Jefferson, uno de los precursores norteamericanos del concepto de libertad.
–Desde su estreno en 2006 en Los Angeles, la obra se presentó en lugares tan distintos como España, Hong Kong, Colombia y ahora Argentina, entre otros. ¿Cuál es el efecto que genera una obra como ésta, teniendo en cuenta las diferentes realidades sociales, políticas y culturales de los públicos?
–Fueron efectos muy distintos. En Hong Kong, por ejemplo, fue más bien de asombro o de paralización, porque lo que se narra en el libro es un fenómeno muy vigente allí. En cambio, en España era mucho más libre porque habían vivido bajo la dictadura de Franco y todos tenían algún recuerdo sobre cómo era vivir bajo un régimen totalitario. Todo eso le dio una energía muy palpable a la obra. En Bogotá tuvimos una respuesta más o menos similar. Creo que el espectáculo tiene un mensaje para todas las sociedades y me interesaba mucho hacer el recorrido por Sudamérica, ya que acá está muy presente el recuerdo de las dictaduras y los gobiernos totalitarios, incluso más que en España.
–En 1984 está latente la cuestión del miedo como forma de imponer el poder. ¿Cómo ve esa relación actualmente?
–Creo que ya no se trata de la conquista de tierras, sino de la apropiación de recursos para que las elites sigan en el poder y las clases medias y bajas permanezcan igual. Eso y la dominación se logran en gran parte a través del miedo. En el libro se habla de un enemigo indestructible. Una guerra perpetua sólo puede llevarse adelante a través del miedo, y el enemigo que tenemos ahora es el terrorismo; es decir, un concepto. Entonces la maquinaria de guerra funciona constantemente porque no se puede derrotar a un concepto. Las guerras ya no son como antes, cuando se conquistaba tierra, se ganaba y todo terminaba. Ahora es algo que dura para siempre.
–En ese sentido, Michael Gene Sullivan dijo que Estados Unidos nunca había estado tan ciego por el miedo. ¿Coincide?
–Probablemente. Cada vez que fuimos a la guerra hubo miedo y muchos fueron presos por oponerse a eso. La situación es bastante mala porque la gente tiene bastante miedo del terrorismo. Basta tomar un avión para darse cuenta de eso. Yo trato de reírme, pero es terrible.
–El libro no sólo habla sobre la guerra, sino también sobre la fantasía de que se está cada vez mejor. ¿Eso está también en la obra?
–Claro, las telepantallas siempre dicen que la vida es buena, que aumentó la producción, que subió la calidad de vida. Eso sigue pasando en la actualidad cuando escuchamos cosas en la televisión que no son verdad. Orwell habla de los dos minutos de odio en los que todos se paran frente a una gran pantalla y se enojan con el enemigo durante ese tiempo. Hace un par de años me di cuenta de que yo, de alguna forma, hacía lo mismo y me deshice de la televisión. Yo participaba en las dos horas de odio mirando los noticieros y enojándome con Bush o con quien sea. Y un par de meses más tarde me di cuenta de que durante esas dos horas me sentaba, ponía un disco y escuchaba música. Por eso hay que darse cuenta de que es totalmente innecesario involucrarse en ese odio. Ya sé lo que siento, estoy informado, sé lo que pasa en el mundo, sé cómo voy a votar y no necesito todo ese odio en mi vida. De hecho, es ese odio el que nos desestabiliza. Fijate que mientras la izquierda y la derecha pelean entre sí, no se dan cuenta de todo lo que tienen en común. Creo que el propósito de la televisión es mantenernos divididos.
–Usted habla del odio de la televisión, y tanto aquí como en varias partes del mundo el programa Gran Hermano es un éxito. ¿Cómo ve que ese fenómeno que tanto temía Orwell hoy sea una realidad?
–Además de todo lo anterior, la televisión y los reality shows nos deshumanizan. No les interesa la pasión, la poesía, el arte ni nada de lo mejor de nosotros como seres humanos, sino simplemente ver comportamientos bastante asquerosos: alguien que se divorcia, que está borracho y llora. Los ratings más altos corresponden a los programas con peores comportamientos, y eso dice mucho acerca de nosotros, de por qué queremos ver eso. Pero tengo esperanza acerca de esto. Por ejemplo, ¿cuánta gente ve aquí esos programas?
–Varios millones. Incluso fue durante varios años uno de los programas más vistos.
–Bueno, son esos varios millones contra toda la población de este país, así que todavía hay esperanza.
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