Cinéfilos y pochocleros, de parabienes
Entre la catarata de próximos estrenos hay varias fijas para los premios Oscar, cuyas nominaciones se conocerán el 16 de enero. Pero no sólo de tanques vive el espectador. En el primer mes del año se verán cuatro películas francesas.
Por Ezequiel Boetti
El almanaque de 2013 deja caer sus últimas hojitas resoplando con la nostalgia anticipada de irse para nunca más volver. Mientras tanto, el de 2014 sonríe socarronamente, como si supiera de antemano que cada uno de sus 52 jueves será motivo de discusiones y peleas por las salas de un sistema de exhibición cada día más cerca del colapso. Las películas, en cambio, se mantendrán al margen, enfrascadas en sus propias batallas, en busca de satisfacer al espectador. Por lo tanto, y al menos por un rato, urge dejar de lado las polémicas y debates y centrarse exclusivamente en ellas, más precisamente en las que vendrán. Y lo que hay luce diabólicamente encantador: varias fijas para los premios Oscar –cuyas nominaciones se conocerán el 16 de enero–, directores de renombre provenientes de todas partes del mundo, tanques hollywoodenses y algunas producciones nacionales que darán que hablar. Es tiempo, entonces, de pegarse un panzazo contra la pileta electrificada de los próximos estrenos.
Camino hacia las doradas
No hay que ir mucho tiempo atrás para recordar que los premios Oscar se entregaban a fines de marzo, haciendo de febrero una alfombra roja de candidatas. Pero ahora la ceremonia se adelantó, y además puede haber hasta diez nominadas a Mejor Película. Febrero, claro está, no alcanza. El que salva las papas es enero, que albergará varias películas con olor a Oscar. O, cuanto mínimo, a Globo de Oro. La primera de ellas llegará el jueves próximo, con las migas del pan dulce sobre la mesa. El lobo de Wall Street viene en silencio (apenas dos nominaciones a los Golden Globes y poca polvareda entre periodistas), aunque esta aproximación a la vida de un corredor de bolsa neoyorquino está dirigida por un nueve veces ternado por la Academia como Martin Scorsese y protagonizada por Leonardo DiCaprio. Descartarla, jamás. Ese mismo día será el turno de la notable La vida de Adèle, la gran ganadora del último Festival de Cannes. Es cierto que la de Abdellatif Kechiche es una producción francesa y no fue elegida para representar a su país en el rubro de Mejor Película Extranjera por estrenarse diez días después del plazo máximo estipulado (“Ese rubro no le importa a nadie”, se excusó el distribuidor), pero dos nominaciones a los Globos y su mención en cuanto ranking de medios especializados exista (entre ellos el de la reconocida Sight & Sound) la hacen merecedora de un lugar.
El avispero dorado recién volverá a agitarse con furia el jueves 23, cuando lleguen Escándalo americano y El sueño de Walt. La primera, favorita del año de la asociación de críticos de Nueva York, viene adosada de ese imán de premios que es el “basada en hechos reales” (para colmo una operación exitosa del FBI) y firmada por el nuevo niño mimado de Hollywood, David O. Russell (El lado luminoso de la vida). Además, está bien perfilada en el asunto nominaciones: encabezó la de los Golden Globes con siete, ocho en los Satellite otorgados por la prensa de espectáculos y dos en los influyentes SAG del sindicato de actores. La segunda corre desde atrás, pero tiene al siempre eficaz Tom Hanks interpretando que al Walt del título. Walt que no es otro que Disney, ya que el film de John Lee Hancock recrea el encuentro entre él y la autora de Mary Poppins.
El primer jueves de febrero será para alquilar balcones, o butacas. Ese día llegará 12 años de esclavitud, de Steve McQueen. La del homónimo del actor es una de esas películas que no puede fallar. O quizás sí, porque ya se sabe que en los Oscar impera cualquiera cosa menos la lógica. Lo cierto es que el opus tres del británico lidera las nominaciones a los Independent Spirit, los Satellite y los Globos –este último ex aqueo con Escándalo americano–, con siete, diez y siete, respectivamente, además de haber sido elegida como mejor película por varias asociaciones estadounidenses de críticos. ¿Más para el 6? Sí, Agosto. La adaptación a la pantalla grande de la obra de Tracy Letts, que narra los avatares de la disfuncional familia Weston, tiene una cuadrilla de intérpretes imbatibles, que justificará la presencia de varios de ellos en las ternas actorales. Allí están, entre otros potenciales candidatos, Meryl Streep (17 nominaciones, 3 estatuillas), Julia Roberts, Chris Cooper, Ewan McGregor y Sam Shepard. Y si se habla de actores, qué decir de Judi Dench, ama y señora de Philomena (va el 20/2), otra fija de las ternas actorales que, quizás, pueda significar el regreso del menguante Stephen Frears a los primeros planos internacionales.
El 13 será el turno de otra que viene pisando fuerte entre los críticos, Inside Llewyn Davis. Aquí hay al menos dos razones para apostarle unos pesos en la carrera rumbo a la noche de los Oscar: Joel y Ethan Coen. Los nombres de los realizadores de Fargo y Sin lugar para los débiles aspiran a un lugarcito entre los nominados con esta historia de un joven cantante de folk en el universo de Greenwich Village en 1961. A este malón de candidatas podrían sumarse dos películas con distribución asegurada en la Argentina. Una es Her, de Spike Jonze y con el gran Joaquin Phoenix; y la otra es la seis veces nominada en los Independent Spirit Nebraska, de Alexander Payne, cráneo detrás de las notables Entrecopas y Los descendientes. Al cierre de esta nota figuraban en carpeta para el 6 y 20 de marzo, respectivamente, pero es más que probable que se adelanten, siempre y cuando el 16 de enero sus nombres suenen en la madrugada de Los Angeles.
El mundo en pantalla
Es cierto que la cartelera ya no es lo rica en variedad que alguna vez, hace ya varias décadas, supo ser, pero la oferta de cine europeo se mantiene como una sana costumbre gracias a un grupo de distribuidoras que siguen haciendo malabares comerciales. Así, gracias a empresas como IFA, Mirada, Zeta Films y CDI, varios títulos del viejo continente tendrán su espacio en algún momento de 2014. En enero habrá no una sino cuatro películas francesas. Es que a la ya mencionada La vida de Adèle (2/1) se le sumará En la casa, anteúltimo opus del siempre interesante François Ozon, con lanzamiento pautado para el 9/1. Una semana después será el turno de El tiempo de los amantes, de Jérôme Bonnell y con Emmanuelle Devos y Gabriel Byrne, misma fecha en la que se verá la italiana La mejor oferta, de Giuseppe “Cinema paradiso” Tornatore. El cuarteto galo cerrará en fecha a confirmar con Ella se va, dirigida por la también actriz Emmanuelle Bercot y protagonizada por Catherine Deneuve.
La nómina sumará dos exponentes de renombre durante febrero con El pasado, debut del iraní Asghar Farhadi (La separación) en tierras francesas con la argentina nacionalizada Bérénice Bejo, y La grande bellezza (27/2), de Paolo Sorrentino, que viene de polarizar a la crítica en el último festival de Cannes y de arrasar en los European Film Awards (mejor película, dirección, actor y montaje) entregados a comienzos de diciembre en Berlín. Y si de polarizar se trata, bastará esperar hasta el 20/3 para ver las reacciones ante la explicitud sexual de L’inconnu du lac.(El desconocido del lago) El opus seis de Alain Guiraudie, visto aquí en el último Festival de Mar del Plata, desató un escándalo en Francia cuando dos municipios ordenaron levantar los afiches de promoción en los que se veía a dos hombres besándose y otro practicando sexo oral.
Menos polémica promete Berberian sound studio, de Peter Strickland, que luego de alzarse con el premio a Mejor Película de la Competencia Internacional del último Bafici se estrenará en una fecha a confirmar de marzo. El mes cerrará con la coproducción árabe-alemana Wadjda, nominada a los Satellite como Mejor Film extranjero y en el rubro Opera prima de los Independent Spirit.
El engorde seguirá durante el segundo trimestre. Desde Rumania llegará, el 17/4, Atardecer en Bucarest, marcando el regreso de Corneliu Porumboiu a la cartelera argentina después de Bucarest 12:08 y Policía, adjetivo. Un mes más tarde, el veteranísimo Ettore Scola dirá presente con Che strano chiamarsi Federico, una suerte de reflexión acerca de la figura de Federico Fellini. ¿Más nombres para este boletín? Valeria Bruni Tedeschi con Un château en Italie, Martin Provost (Séraphine) con Violette, Philippe Claudel (Hace mucho que te quiero) con Avant l’hiver. Un poco demoradas también llegarán Polisse y Kauwboy. Dirigida por Maïwenn, la primera propone un retrato del día a día de la unidad infantil de la policía parisina y viene cosechando amores y odios desde Cannes ’11. La otra, proveniente de los Países Bajos y estrenada en la Berlinale ’12, aborda el proceso madurativo de una nena de diez años.
Batalla de tanques
Son, mal que les pese a varios, el motor de la industria cinematográfica, la panacea de la exhibición como negocio. En este recorrido no puede faltar, entonces, un somero repaso por las principales superproducciones norteamericanas que atestarán las salas. Superproducciones que arribarán desde este jueves con la animada Frozen, de Disney, y que continuarán haciéndolo dos semanas después con la adaptación del best-seller Los juegos de Ender. Para el 13 de febrero está pautado el regreso de Robocop, ahora con el brasileño José Padilha (Tropa de elite) al mando y un tal Joel Kinnaman como Alex Murphy, y la versión cinematográfica del juego fierrero Need for Speed, con Aaron “Jesse Pinkman” Paul. Una semanita más tarde, la segunda infantil, que es además la adaptación de una serie británica de los ’50: Las aventuras de Peabody y Sherman.
Marzo comenzará a pura testosterona con el regreso de los torneados de 300 para El Nacimiento de un Imperio, ahora con Noam Murro en la dirección en reemplazo del siempre estilizado Zack Snyder. Y terminará de la misma forma, ya que el 27/3 llegará la segunda Capitán América, El soldado de invierno. Después habrá dos semanas ideales para llevar al nene o la nena, ya que el 10/4 volverán los plumíferos de Río 2, el 17 llegará Osos, uno de esos documentales con animales antropomorfizados de Disney, y el 24 la secuela de Spiderman, El increíble Hombre Araña 2, otra vez con Andrew Garfield en la piel de Peter Parker. Y así, casi en un pestañeo, se llegó a mayo, momento en que los cines tronarán ante una nueva versión “más real”, según prometió el director Gareth Edwards, de Godzilla (15/5) y un nuevo encuentro de los Xmen para Días del futuro pasado (22/5).
Y después, junio y julio. La inminencia de las vacaciones de invierno se traducirá en una cartelera rebosante de tanques. Esto en el sentido más literal del término: para el 3 de julio se anuncia Transformers 4, otra vez con el rompe-todo Michael Bay al mando. El 17 llegarán las continuaciones de Aviones, producto de Disney que funcionó menos a nivel artístico que comercial, y El planeta de los simios, que lo hizo en los dos niveles. Todo esto es una previa a Guardianes de la galaxia, nueva reunión de superhéroes de la factoría Marvel para defender al mundo de vaya uno a saber qué, ya que aún no hay sinopsis oficiales. Y pasarán las vacaciones de invierno, más no así las superproducciones: el 7/8 vendrá Teenage Mutant Ninja Turtles, que como su título lo indica se remonta a los orígenes de las tortugas parlanchinas y peleadoras, y el 15 la demorada Sin City 2, otra vez con un sinfín de estrellas del firmamento de Hollywood en el afiche: Joseph Gordon-Levitt, Bruce Willis, Jessica Alba, Mickey Rourke y... Lady Gaga, quien vuelve a ponerse a las órdenes de Robert Rodríguez después la reciente Machete Kills.
Nombres, nombres y más nombres
Más o menos exitosos, de capa caída o en pleno ascenso, veteranos o nóveles, de aquí y de allá, los directores que aún se imponen por sobre el preseteo marketinero de sus films también tendrán su espacio desde el mismísimo comienzo de 2014. Ahora nomás, este jueves, se verá La vida secreta de Walter Mitty, desconcertante comedia melanco protagonizada y dirigida por Ben Stiller. Una semana más tarde será el turno del debut en la dirección del actor Joseph Gordon Levitt (500 días con ella, Batman: el caballero de la noche asciende) en Entre sus manos, que viene cosechando buenos comentarios desde su estreno en el último Festival de Sundance y su paso por la Berlinale. Justamente allí, en el festival teutón, fue donde Daniel Burman alcanzó gran parte de su prestigio internacional. El ganador del Gran Premio del Jurado en 2004 por El abrazo partido llegará a la cartelera el 16/1 con El misterio de la felicidad, comedia dramática protagonizada por Guillermo Francella e Inés Estévez y, además, primera gran apuesta del cine comercial argentino del año.
Para la segunda habrá que esperar un mes. Más precisamente hasta el 13/2, fecha de estreno de Betibú, adaptación del libro homónimo de Claudia Piñeiro acerca de un misterioso suicidio en un country dirigida por Miguel Cohan (Sin retorno). El adiós a febrero llegará el 27 con Operación monumento, comedia dramática ambientada en la Segunda Guerra Mundial. El súper elenco, encabezado por Matt Damon, Bill Murray, John Goodman, Jean Dujardin, Cate Blanchett y George Clooney, y los antecedentes de este último como director (Bienvenidos a Collinwood, Buenas noches y buena suerte, Secretos de estado) generaron más de una relamida entre los electores del Oscar, hasta que supieron que se estrenaría fuera de los tiempos determinados por la Academia. Todo porque, según Clooney, no se llegó a “terminarla a tiempo”.
Y habrá mucho, mucho más: el 27/3 volverán Wes Anderson con The Grand Budapest Hotel y Marcelo Piñeyro con Ismael, el 10/4 será el momento de ver la remake de la surcoreana Oldboy en manos de Spike Lee y el 17/4 llegará Passion, de Brian de Palma. Será, además, el momento de ver en vivo y en directo un hito en la historia de la comedia con el primer estreno en cines de un film de la dupla McKay-Ferrell, Anchorman: The Legend Continues. Y si los fanáticos del género no se quedan conformes, que esperen hasta el 1/5 para ver Los Muppets 2, otra vez con James Bobin como director y co-guionista junto a Nicholas Stoller. También hay que marcar con rojo el 26/6 porque Clint Eastwood estrenará Jersey boys. Otro veterano inquieto es Woody Allen, de quien se volverá a saber de él en octubre con Magic in the moonlight. Finalmente llegará diciembre y, con él, el estreno de la épica de Peter Jackson de cada año, en este caso la tercera parte de El hobbit, que Dios quiera que sea la última. Pero para saberlo habrá que esperar doce meses, cuando ese mismo calendario que ahora muestra sus dientes empiece a sentir la pesadumbre satisfactoria de un largo deber cumplido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario